Informaciones sobre contenidos del libro Simón, opera magna donde se demuestra con pruebas documentales que los Evangelios son una falsificación del siglo IV.
Primer entrega del folletín que supuso la vida de la que sería primero la amante y luego la segunda Lady Hamilton. Podríamos decir que en esta primera parte observamos el ascenso.
La sesión apalabrada de escenas eróticas tal y como las consideraban los antiguos griegos.
La democracia se extendió también a la vida privada y se aventaron hábitos que en otras latitudes eran guardados más celosamente. Por ejemplo, tengo entendido que hebreos, asirios y persas eran mucho más comedidos en sus representaciones de naturaleza íntima. Pero lo griegos se consideraban libres en grado sumo.
Última mirada a las vasijas de la colección de Sir William Hamilton. Recientemente he conocido más sobre su vida y milagros, lo que nos va a dar un número complementario a la serie. Eso hará entender mejor por qué pulió su colección al mejor postor.
Así pues, quedan dos y ambos tienen dos puntos en común, el arte y el juego.
Se está agotando la fuente de Sir William Hamilton, pero antes de que se nos quede sin agua, más por falta de cántaro que por problemas hidraúlicos, veamos un último vistazo a vasijas serias.
Hoy y mañana nos centramos en el color y el dibujo del artista heleno que Monsieur P-F Hugues reflejó para nosotros con su saber hacer y su paciencia.
Final de vasijas elegantes. Lo que quería demostrar debe estarlo, en las residencias lujosas de la Grecia antigua no se vivía peor que en los salones regios de las cortes europeas, tanto medievales como más modernas.
Entramos en el perído clásico y las vasijas empleadas son de una estética y una calidad en la fabricación y la decoración que en nada tienen que envidiar los salones del Rey Sol.
Seguimos viendo, con piezas de la colección citada, cómo fue la evolución de las vasijas de Cerámica en la Grecia antigua. Al principio el gusto de los artistas no era el mismo.
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